No cabe duda que el año 2020 en materia de género ha sido uno de los más productivos del siglo XXI. La lucha feminista contemporánea ha alcanzado logros en materia penal que de no haber sido por todas y cada una de las mujeres que salieron a tomar los espacios públicos no serían realidad.
Conoce las leyes de género que se han aprobado gracias a los esfuerzos feministas.
1. Derecho a la protección de datos de victimas de feminicidio
En mayo de 2020, el Congreso del Estado aprobó la “Ley Ingrid” luego del feminicidio de Ingrid Escamilla, ya que imágenes de su cuerpo fueron filtradas en redes sociales luego de la exposición de su caso. Con dichas acciones, los colectivos feministas mostraron su indignación exigiendo el respeto y la reclusión de las imágenes.
Esta ley evita infiltraciones por parte de los servidores públicos de imágenes, audios, vídeos y cualquier archivo que aluda a las víctimas de feminicidio.
2. Paridad de género en los procesos electorales
Ahora es obligación de los partidos políticos promover la paridad de género en candidaturas, destinar el 3% de su gasto ordinario para capacitar a mujeres. Como resultado de estas medidas, el porcentaje de integración femenina en el Congreso federal alcanzó una cifra cercana al 35%, lo que implica que haya 185 mujeres diputadas y 42 senadoras, o sea, 227 curules ocupadas por mujeres. Un logro histórico.
3. Derecho a la NO violencia digital (Ley Olympia)
El Senado mexicano aprobó con 87 votos a favor, la Ley Olimpia, que castiga con hasta seis años de cárcel el acoso, hostigamiento y difusión de fotos y videos íntimos en internet y redes sociales sin el consentimiento de los implicados.
Esta ley nació luego de que Olimpia Melo sufrió acoso debido a que su ex pareja publicó un video intimó de ella en redes sociales, por lo que impulso la ley en Puebla, donde se aprobó en 2020.
La noticia fue recibida con alegría por parte de colectivos feministas a las afueras del Senado y por activistas que llevan años luchando contra la pornovenganza en diferentes Estados del país.
Escrito por Alejandrina Rodríguez